Aunque salimos de Saint-Cirq-Lapopie lloviendo, a los pocos kilómetros paró y aunque no salió el sol y el cielo seguía amenazando lluvia optamos por visitar Cahors. El recorrido de los 25 kilómetros que tuvimos que hacer fueron bastante dificultosos, continuas curvas y pavimento mojado nos llevaron casi tres cuartos de hora.
Una vez ya en Cahors, aparcamos el coche a escasos metros de la Tour du Jean XXII, único vestigio del Palacio Duèze construido por la familia del mismo nombre a principios del siglo XIV y mandado reconstruir por Pierre Duèze hermano del que fuera el Papa Juan XXII. Sin embargo fue abandonado por su hijo en 1405 y sus piedras utilizadas para la construcción del puente nuevo.
La torre en cuestión se trata de una construcción en ladrillo y piedra, de planta rectangular con 34 metros de altura, cinco pisos y ventanas germinadas. No esta abierta para su visita.
A escasos metros de la torre citada, nos encontramos con la Iglesia de Saint-Barthélemy construida en el siglo XIV de una sola nave y capillas laterales en estilo gótico meridional con campanario cuadrangular de tres pisos.
Durante bastante tiempo estuvo dedicada a Saint-Etienne de Soubirous y en la misma fue bautizado Jacques Duèze en 1244, el cual posteriormente fue nombrado Papa con el nombre de Juan XXII en 1320 cambiando su advocación a Saint Barthélomy procediendo a su reconstrucción. Durante la Guerra de los cien años concretamente en 1340 los trabajos se pararon quedando una construcción sin cubierta. Las bóvedas fueron construidas a principios del siglo XV.
Mención especial se merece el doble pótico de entrada con arcos apuntados, presentando el primero dos con verja de hierro fundido, y el segundo cuatro, frontón de cristal y puertas de madera. Ambas puertas se encuentran separadas por una bóveda de crucería.
Después de estas dos visitas, cogimos de nuevo el coche para ir a aparcar a poca distancia del monumento mas conocido de la ciudad como es el Pont Valentré.
Empezado a construir en junio de 1308 como un puente fortaleza para la defensa de la ciudad contra los ataques que pudieran venir del sur y que nunca se produjeron. Tiene una longitud de 138 metros con seis arcos góticos de 16,50 metros con avances triangulares almenados y tres torres fortificadas con una altura de 40 metros sobre el nivel de las aguas.
Esta construcción tiene una bonita leyenda que cuenta como el Maestro de obras viendo con la lentitud con la que avanzaba la construcción, decidió hacer un pacto con el Diablo que consistía en que si le ayudaba a terminar la obra lo más rápido posible, le entregaría su alma.
El diablo aceptó el trato y las obras avanzaron tan rápidamente, que viendo el maestro de obras que cuando se muriera iría al infierno, le propuso al diablo un nuevo trato final que consistia en que tenía que llevar agua en una criba a los albañiles para que hiciesen el mortero, fracasando una y otra vez porque el agua se perdía por los agujeros de la criba antes de llegar.
El diablo confesó su error pero juró vengarse. La venganza consistió en que iba a la obra por la noche y rompería la última piedra puesta por los obreros en el angulo superior noreste de la torre central, por lo que fué imposible la terminación total del puente hasta 1378.
En 1880 el puente fue restaurado por el arquitecto Paul Gout, el cual encargó a un escultor local llamado Cyprien-Antonine Calmon la escultura de un pequeño diablo que fue colocado en el punto donde indicaba la leyenda.
Estábamos en plena visita al puente cuando de repente se organizó una tormenta de las que pocas había visto igual en intensidad. Aparte de llover torrencialmente, los relámpagos y chispas que saltaban no muy lejanas eran para imponer al más pintado. Menos mal que viendo los nubarrones negros que había antes de bajarnos del coche nos invitaron a coger los paraguas, no obstante a pesar de ello nos tuvimos que refugiar debajo de la última torre porque con el aire se nos iban encima a estropear los pataguas. Allí abajo estuvimos cerca de media hora pues eramos incapaces de salir, hasta que la lluvia amainó un poco y pudimos regresar al coche.
Los casi 60 kilómetros de vuelta hasta el camping fueron realmente terroríficos toda vez que no paraba de llover torrencialmente y con un viento más que generoso. Por fin en el camping y casi directamente a la cama.
Pais : Francia Región : Occitania Departamento : Lot Distrito : Cahors Superficie : 65 km² Moneda : Euro Coordenadas Ayuntamiento GPS : Latitud: 44°26'49.1"N Longitud: 1°26'27.9"E Google Maps : 44.446980, 1.441085 Oficina de TurismoPlace François MitterrandTfno. : +33 565 53 20 65 46000 Cahors |