A pocos metros de la iglesia de San Joan de Caselles de Canillo en el margen izquierdo de la Carretera general 2 en dirección a Puerto de Envalira, nos encontraremos con la Cascada de Les Moles de unos treinta metros de altura. Su origen tiene lugar en la última glaciación, perteneciente al valle glacial principal, formado por la Valira de Oriente, que tiende a erosionar más rápidamente los valles, en este caso el Valle del Río, haciendo que al derretirse los glaciares, quede en suspensión unos metros por encima del valle principal. (Traducción del cartel explicativo que existe en este lugar).
En un principio contaba con un pequeño aparcamiento, mesas, bancos para hacer un pic-nic con una empinada escalera en el lado derecho llevaba hasta una plataforma situada casi al comienzo de la cascada. Igualmente estaba equipada para poder descender por ella con las técnicas propias utilizadas en el descenso de barrancos y gargantas. Sin embargo por unos desprendimientos acaecidos en febrero del 2019 todo esto se ha clausurado y ademas conservado en muy mal estado. Las mesas y bancos han desaparecido, las escaleras para subir a la plataforma, a simple vista están en un estado calamitoso y el aparcamiento esta totalmente clausurado por lo que se tiene que aparcar en el arcén que menos mal en estos metros es más ancho de lo habitual.
A pesar de lo expuesto merece la pena una pequeña parada solo para oír el ruido de esta pequeña cascada.