Su historia se encuentra en paralelo con los otros tres pueblos anteriores. Durante los siglos XVI y XVII fue un anejo de Berzosa.
Patrimonio Cultural y Arquitectónico
Iglesia Parroquial de San Andrés Apóstol es una construcción de los siglos XIX y XX presentando una serie de rasgos que la diferencia del restos de las de la zona, toda vez que aparenta ser más una construcción civil que una religiosa por el aspecto que presenta su fachada.
En su interior de una única nave de forma rectangular se pueden ver esculturas barrocas, retablo neogótico y una pintura de San Andrés.
La espadaña a los pies de la nave consta de tres cuerpos de mampostería y ladrillo. El cuerpo del medio presenta dos vanos con arcos de medio punto con la particularidad en mi visita de que en solo uno de ellos se ubica una campana. El último cuerpo rematado con un frontón, presenta un vano más pequeño con arco de medio punto pero sin campana.
Potro de herrar que era la construcción donde antiguamente se herraba al ganado, siendo muy comunes sobre todo en la zona de la SIERRA NORTE de la Comunidad de Madrid. Constaban de dos hileras paralelas de tres postes cada una que comúnmente eran de granito aunque los más antiguos podrían ser de madera. Los dos pares más altos estaban unidos por palos de madera o varas metálicas, y estos a su vez con el par más bajo se encontraban unidos de la misma manera.
Entre los postes del segundo par más alto se encontraba el yugo, lugar donde se fijaba la cabeza del animal para inmovilizarlo además de pasarle dos cinchas de cuero por la panza atadas a las varas metálicas o palos de madera.
Una vez efectuada la faena del inmovilizado era cuando entraba el herrero primero para quitar las viejas herraduras, luego limpiar las pezuñas para terminar poniendo herraduras nuevas.
Antiguos lavaderos. En un principio las mujeres de este pueblo iban a lavar en las piedra lisas existentes en un pequeño remanso existente en el arroyo de la Pila. Con el paso del tiempo alrededor de los años sesenta el siglo XX para procurar facilitar la vida a las lavanderas se construye en la parte alta del pueblo en el camino del cementerio un lavadero. Se trata de una construcción rectangular con seis ventanas y una pileta dividida en tres partes, una para el lavado y dos para el aclarado.
En aquellos tiempos si el lavadero tenía importancia como tal, igualmente la tenía por ser el lugar donde para las mujeres aparte de lavar se juntaban para hablar y comentar lo que sucedía en el pueblo.