Llegamos a Arles desde Marsella en un día bastante gris que amenazaba lluvia como así ocurrió poco después.
Ciudad fundada con el nombre de Theline por los griegos en el siglo VI a.C.. Antes de que fuera tomada por los romanos en el 123 a.C. estuvo habitada por los Celtas que la bautizaron con el nombre de Arelate, llegando a su mayor esplendor durante los siglos IV y V. Durante bastantes años debido a la peste y a la invasión sarracena la ciudad sufrió un deterioro bastante acusado.
Durante los siglos XVII y XVIII numerosos particulares de alto nivel económico levantaron algunos palacios y la ciudad se fue rehaciendo convirtiéndose de nuevo en puerto muy importante en el Mediterráneo, hasta la llegada del ferrocarril que restó importancia al comercio fluvial, con lo que el declive de la ciudad volvió a estar presente. Debido a esto lo que antes todo era bullicio se convirtió en tranquilidad, cosa que aprovechó el pintor Vincent van Gogh para establecerse aquí en 1888. Durante su estancia en esta ciudad elaboró cerca de 300 dibujos y pinturas.
Comenzamos nuestra visita en la Plaza de la República, centro neurálgico de la ciudad. En la misma sobresale en medio de una fuente del siglo XVII un gran Obelisco de granito rojo del siglo IV que antes se situaba en la spina del circo. El mencionado obelisco se partió en dos después de ser abandonado el circo, siendo restaurado en 1676.
Frente al obelisco mencionado se encuentra el edificio del Ayuntamiento reconstruido en 1675 junto a la Torre del Reloj de 1555. Fue el arquitecto Jacques Peytret quien dirigió las obras bajo los planos de el arquitecto Jules Hardouin-Mansart uno de los arquitectos del Palacio de Versalles
A la derecha del Ayuntamiento se encuentra la Iglesia de Santa Ana, en el dia de nuestra visita cerrada.
A la izquierda del mencionado Ayuntamiento, se encuentra la iglesia y el claustro de Saint-Trophime.
La iglesia fue construida a finales del siglo XI o principios del XII sobre otra carolingia del siglo V. El interior de una sola nave de cinco tramos con bóveda de cañón roto y dos pequeños laterales con capillas, de la que cabe destacar la de Santo Sepulcro con una talla en piedra representando el el entierro de Cristo.
Del exterior merece destacar el pórtico con relieves representando el juicio final.
El claustro de Saint-Trophime se construyó entre los siglo XII al XIV declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1981.
Debido a la dilatación en el tiempo de construcción. el claustro presenta las galerias norte y este románicas del siglo XII y las sur y oeste en estilo gotico del siglo XIV. La razón por la que no se terminó hasta el siglo XIV fue debida al caer la influencia de Arlés en favor de Aix y Avignon. En este lugar igualmente se pueden ver el refectorio, la sala capitular y un dormitorio. Estas estancias fueron ocupadas por viviendas tras la revolución. como comentario decir que en 1178 fue coronado aquí como rey de Arlés el emperador Federico Barbarroja.
Si se encuentran abiertas es muy recomendables subir a las galerías superiores y obtener una buena visual del claustro desde la parte superior.
Teatro Antiguo Romano. Apenas 200 metros lo separan de la Plaza de la República. Se trata de una construcción del siglo I a.C. en tiempos del emperador Augusto, convirtiéndose en uno de los primeros teatros de piedra del imperio romano.
La construcción presentaba tres partes bastante diferenciadas. La Cavea en forma semicircular donde se aposentaban los espectadores, con una capacidad de 10.000 personas, un diámetro de 102 metros y 33 hileras de gradas, el escenario donde se actuaba y un muro posterior a este que servía como decorado que quizá en su tiempo tuviera un pequeño tejado para procurar resguardo a los actores y actrices. Igualmente esta parte contenía 100 columnas corintias de las cuales solo quedan dos.
El anfiteatro o Las Arenas. Apenas cinco minutos andando separan esta construcción del Teatro antiguo, los suficientes para ponernos calados hasta los huesos por la lluvia que hizo su aparición.
Construido en la década de los 80-90 sobre otra edificación construida un siglo antes, incluyó varias características del Coliseum de Roma. La arena de forma ovalada tiene en su parte mas larga 136 metros con unas gradas en dos niveles con capacidad de hasta de 21.000 espectadores, a las cuales se acceden mediante soportales que a su vez desembocaban en vomitorios que salen directamente a las gradas.
En este espacio se celebraban diversos espectáculos siendo el principal la lucha de gladiadores. En la actualidad se celebran corridas de toros, conciertos y otros eventos.
La climatología iba empeorando y si bien no nos llovió durante la corta visita, fue terminarla y empezar a caer agua a cántaros, lo cual nos llevó a irnos al coche y dar por terminar la visita a Arles, dejando de ver algunas otras que nos hubiesen gustado.
Pont Langlois. En el siglo XIX en el sur de Francia se abrieron una serie de canales que iban a desembocar al Mediterráneo, siendo un de los mismos el que iba desde Arlés hasta Port de Bouc. Con el fin de atravesar el mismo se construyeron cinco puentes fijos y nueve puentes de madera levadizos. El primero de ellos ubicado a las afuera de Arlés, fue el llamado Pont Langlois, inmortalizado por Vicent Van Gogh.
El actual puente que se puede ver, es la estructura del Puente de Fos que se trajo hasta aquí en 1959. Este puente fue el único que sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial, siendo comprado por la Oficina de Turismo de Arlés para reconstruir el puente que pintor Van Gogh, que por diferentes circunstancias se tuvo que montar unos kilómetros más abajo de donde se encontraba el auténtico Pont Langlois.
Pais : Francia Región : Provenza-Alpes-Costa Azul Departamento : Bocas del Ródano Distrito : Arlés Superficie : 759 km² Moneda : Euro Coordenadas Ayuntamiento GPS : Latitud: 43°40'37 Longitud: 4°37'39"E Google Maps : 43.676952, 4.627552 Oficina Turismo9 Bd des LicesTfno. : +33 490 18 41 20 13200 Arles |