Aquella noche como casi siempre se puso a llover, amaneciendo por la mañana exactamente igual. Desayuno, ducha e ir al supermecado para comprar el pan y algo de cenar para la vuelta ya que presentía que volveríamos a una hora mas o menos temprana, como sucedió. La circulación era fluida por la A44 por lo que llegamos en apenas una hora hasta entrar en la ciudad.

Por fin llegamos a laplaza donde se ubica el museo VAN GOGH no sin antes sufrir un poco la conducción por esta ciudad que es verdaderamente un caos. Dejamos el coche en el parking subterraneo situado a espaldas del museo pero con los paraguas en ristre, nos acercamos a la puerta de entrada del mismo. Aquello era una locura, los visitantes arropados por paraguas constituían una fila de mas de 700 metros, es decir si por cada pase entran alrededor de 50 ó 70 personas, ello hubiera supuesto una espera de más de dos horas. Viendo lo visto nos dirigimos otra vez al parking para coger el coche y buscar un parking lo mas próximo al centro posible, el elegido fue el "Q-PARK DE BIJENKORF" a escasos metros de la PLAZA DAM. las tarifas por aparcar depende de las horas y los días, pero en generalun poco caro.

La lluvia persistía y como era de hora de comer algo decidimos hacerlo en un pequeño local cercano donde servía pizzas, croissants rellenos y algunas viandas mas todas ya manufacturadas. La comida me era igual, lo importante sería descansar y guarecerse de la lluvia constante.

Después de esto una ligera visita a la Plaza mencionada e internaros por la Calle KALVERSTRAAT, la calle peatonal y comercial mas exclusiva de Amsterdam. Los precios de viviendas y locales son unos de los más caros de europa. Amparo y Rodrigo tan felices entrando y saliendo de las numerosas tiendas existentes, mientras que yo bastante cabreado aguantaba la lluvia como podía con el paraguas o resguardándome bajo las entradas de los establecimientos, sacando la cámara en los pequeños intervalos de tiempo que paraba de llover.

Serían alrededor de las 20 horas cuando decidimos a acabar con esto, nos dirigimos al parking y de nuevo para el camping para recorrer otros 50 kilómetros. No me lo podía creer, una día casi perdido, y digo casi por no decir totalmente.

A la mañana siguiente nos esperaba nuevamente otro desplazamiento a Amsterdam.

La noche entera como siempre se la paso lloviendo. Sin embargo al despertarnos observamos que pese a estar el cielo cubierto la lluvia había desaparecido.

Al contrario que el dia anterior, nos dispusimos ir directamente al centro y al parking que habíamos conocido, que aunque bastante caro estaba en pleno centro. La lluvia era intermitente, permitiéndome sacar la cámara y hacer algunas fotografías aunque siempre con el paraguas en el brazo por si acaso.

Dejando el coche a reacaudo, nos fuimos a visitar el edificio de la Estación Central por la calle Damrak, construcción obra del arquitecto Pierre Cuypers entre 1881 y 1889 y del ingeniero Dolf Van Gendt. Aunque no la vayas a utilizar, merece su visita exterior.

A pocos metros de esta estación nos encontraremos con un gran Embarcadero donde podremos tomar uno de los pequeños barcos que navegan por los canales.

Volviendo sobre nuestros pasos hacia la Plaza DAM, nos encontramos otros de los edificios más representativos de Amsterdam como es la Bolsa de Berlage (Beurs van Berlage), obra del arquitecto Hendrik Petrus Berlage, construido entre 1896 y 1903.

Inagurado en mayo de 1903 por la Reina Gillermina, su función sería la de albergar la Bolsa de Comercio y posteriormente tambien la de cereales, monedas y diferentes mercancías. Lo que mas llama la atención es la austeridad de su fachada realizada en ladrillo rojo y rematada por una torre singular con Reloj. En el frontal se lpuede observar un relieve obra de Lambertus Zeil en el que se representa EL Paraiso, EL Futuro y Cultura en Decaimiento. Las últimas operaciones realizadas como Bolsa de Comercio fueron en 1998 y en la actualidad sus grandes salas se dedican como sede de exhibiciones, congresos etc y sala de conciertos de la Orquesta Filarmónica de los Paises Bajos. El interior se puede visitar previo pago, libremente o con visita guiada. Lamentablemente no la pudimos efectuar por falta de tiempo material, aunque supongo que nos hubiese gustado.

Dejando atrás esto nos dirigimos de nuevo a la Plaza Dam y de alli al Barrio Rojo bastante cercano a mencionada plaza. Paseando por las calles del este barrio y a pesar de hora temprana para ejercer cierto hábitos o profesiones, pudimos observar como en la planta baja de numerosas casas existían habitáculos pequeños con ventanales a la calle, algunos de ellos en alquiler, en los que las prostitutas enseñaban con diminutos sujetadores y tangas o alguna sin nada sus atributos sexuales, sin importarlas lo mas mínimo que fueses acompañado o no, te reclaman sin nigun pudor.

Numerosas tiendas de sex-shop se aglutinan en las diversas calles y callejuelas en las que aparte de estos artículos ofrecen semillas para la plantacion de marihuana, y supuesto los conocidos CoffeShops donde se vende para su consumos in situ diversas clases de marihuana. Continuando nuestro paseofuimos a parar en el pequeño barrio chino, dentro de este barrio rojo, en el que los restaurantes y tiendas abundan. En los escaparates patos y pollos lacados con un aspecto bastante indeseable se muestran para su degustación.

Como era hora de comer decidimo meternos en un de estos restaurantes. Se trataba del New King en la Calle Zeedijk 115 justo enfrente del Templo Budista de Amsterdam que igualmente se puede visitar. Particularmente no somos habituales de restaurantes orientales, sin embargo tambien es cierto que los frecuentamos en Madrid de vez en cuando. Los componentes de los platos bastantes iguales a los habituales pero con sabores bastante más intensos a los que estamos habituados, en fin se dejaban comer aunque a un precio mucho mas elevado que en España.

Desde aquí y de nuevo para mi exasperación de nuevo nos encaminamos a la calle KALVERSTRAAT para continuar la visitas a las tiendas y acercarnos al MERCADO DE LAS FLORES que se encuentra al finalizar la mencionada calle en MUNTPLEIN donde se encuentra la Torre MUNTTOREN. Esta fué construída en 1480 siendo en su día una de las puertas de la muralla que tenía ciudad. Un incendio acaecido en 1618 destruyó el conjunto, dejando a salvo el cuerpo de guardia y la torre occidental que es la que se ve actualmente, aunque reconstruida en 1620 en estilo renacentista.

Continuamos andando escasos metros para encontrarnos con el MERCADO DE FLORES antes mencionado. No se si porque la hora era algo avanzada, el caso es que poquísmas de las casetas con las que cuenta se encontraban abiertas. Compra de algunos bulbos de tulipanes metidos en unos zuecos y vuelta al parking. Eran ya las ocho y media de la tarde y aparte de que empezó a llover de nuevo, aun nos quedaban 50 kilómetros de vuelta al camping. Mañana nos esperaba de nuevo Amsterdam.