Parece ser que Cobeña es un derivado de Cueva Pequeña, que tras varias y sucesivas corrupciones del lenguaje, terminó por llamarse COBEÑA.
Gentilicio: Cobeñeros/as - Cobeñudos/as.
Según lo referenciado en el escrito de 1888 de Andrés Marín Pérez, se valida la opción de que fue fundado por los árabes al recoger una leyenda que dice: Fundado este pueblo por los árabes en el siglo X, fue cedido por el rey moro a un distinguido guerrillero para que lo disfrutase como premio a sus distinguidos servicios, aunque quizás se tratase de una población muy pequeña dedicada a la agricultura.
Si nos atenemos a los escritos en los que se hace referencia a Cobeña, el primero es posterior a la reconquista y repoblación de estos territorios llevados a cabo por el rey Alfonso VI, concretamente uno aparecido en 1233 en el cual aparece un pacto foral entre el arzobispo de Toledo, señor de Talamanca, y los vecinos de Cobeña, relativo a una viñas que estos tenían arrendadas en tierras de Talamanca.
Posteriormente ya en 1369, tras el asesinato de Pedro I a manos de su hermano Enrique II, iniciando la dinastía de los Trastamara, este último ya convertido en rey, entrega a Don Pedro González de Mendoza los pueblos de Cobeña, Alcobendas y Barajas, como recompensa por su apoyo en las luchas civiles, quedando dichos pueblos separados de la "Comunidad de Villa y Tierra de Madrid", quedando durante siglos ligada Cobeña a la familia de los Mendoza formando parte de un señorío mobiliario, dependiendo de Guadalajara.
A lo largo del siglo XIV huyendo de las persecuciones de que eran víctimas, se establecieron en Cobeña una comunidad judía, llegando a ser de setenta familias que se dedicaron sobre todo al comercio, lo cual contribuyó al crecimiento del pueblo. Los judíos estuvieron en Cobeña hasta su expulsión en 1492. De esta época han quedado una serie de documentos que reflejan la importancia comercial que los mismos tuvieron en la zona, los cuales hacen mención a unas cuantiosas deudas que adquirieron con ellos diversos vecinos de las localidades próximas. Con motivo de la riqueza traída por los judíos al pueblo se produjo el dicho de "Mas vale Cobeña que Alcalá y sus tierras".
A la muerte de Don Pedro González de Mendoza, Cobeña junto con otras propiedades paso a manos de su hijo Don Diego Hurtado de Mendoza, que a su vez se lo cede a su hija Doña Aldonza de Mendoza, que al fallecer sin descendientes pasa a su hermano Don Iñigo López de Mendoza, primer Marqués de Santillana, siendo en este periodo cuando Cobeña se convierte en Villa con lo que consigue la independencia de otras villas, que conlleva la autonomía en diversos trámites. Tras el fallecimiento de Don Iñigo lega a su tercer hijo Don Lorenzo Suárez de Figueroa Mendoza las villas de Cobeña y Torija. Don Lorenzo es nombrado por Enrique IV en 1466 Conde de La Coruña, lo cual implica que Cobeña pasa a formar parte de este condado.
A finales del siglo XV fallece Don Lorenzo Suárez de Figueroa, heredando el señorío su hijo Don Bernardino Suárez de Mendoza, segundo conde de La Coruña, siendo en este tiempo cuando Cobeña vive tiempos difíciles con la expulsión de los judíos de España que puso en peligro la economía no solo de Cobeña, sino de toda España, además de la consiguiente pérdida de habitantes.
A principios del siglo XVI la ausencia de los judíos se hizo notar, toda vez que la población de Cobeña estaba acostumbrada a mantener lujos que ahora tenían que abandonar toda vez que la expulsión de loa judíos no implicó que tuvieran que seguir pagando servicios, impuestos y alcabalas, con lo que la actividad del pueblo que antes era la del comercio, quedó reducida a la agricultura y a la ganadería.
En 1579 Cobeña pertenecía a la provincia de Guadalajara, dentro del reino de Toledo, sin embargo en lo referente a la justicia dependía de la Cancillería de Valladolid, aunque no se encontraba sujeta a ninguna otra villa o jurisdicción, estando gobernada por alcaldes ordinarios, regidores y procuradores, todos ellos nombrados cada año previamente aprobados por el conde de La Coruña. En cuanto a los asunto eclesiásticos, Cobeña dependía del arzobispado de Toledo, perteneciendo al arciprestazgo de Talamanca. En estos tiempos como se ha mencionado antes, los vecinos se dedicaban a la labranza con el cultivo principalmente del trigo y la cebada, ya que la ganadería quizás por la falta de agua era escasa sobre todo en época estival.
En el siglo XVII Cobeña seguía perteneciendo al Condado de la Coruña, que se encontraba cada vez más empobrecido, arrastrando en su decadencia a Cobeña que fue usada en ocasiones como moneda de cambio en diversas compra-ventas. Al fallecer sin herederos Doña Juana de Mendoza, octava condesa, Cobeña llega a manos de Don Antonio Zapata de Mendoza, biznieto del tercer conde, lo cual no implica que el pueblo se vea implicado en numerosos pleitos por la posesión del condado al fallecer los titulares sin descendencia.
A causa de las importantes sequías habidas sobre todo en la meseta en los años 1629, 1630, 1664 y 1699, Cobeña se vio seriamente afectada por su dependencia de la agricultura. La sequía que se produjo en 1647 afectó sobre todo a la mitad sur de la península, sobre todo en la Mancha. Este hecho ocasionó importantes problemas de abastecimiento para Madrid, emprendiendo el Pósito una serie de medidas como la inspección de los lugares panaderos cercanos, entre los que se encontraba Cobeña donde se hallaron 2000 fanegas de trigo y harina, de las cuales una gran parte fueron requisadas para el suministro de la capital. Esta circunstancia aunque ne un principio supuso un gravamen para el pueblo, a la larga resulto beneficioso, ya que la capital empezó a suministrarse de los pueblo de la Alcarria, entre ellos Cobeña que tuvo el comercio de estas materias asegurado durante todo este siglo.
Durante los siglos XVII y XVIII la economía de Cobeña estaba basada en la agricultura, sobre todo en el cultivo de cereales como el trigo, centeno, avena y cebada, cosechando una pequeña parte de garbanzos, uvas con las que hacían el vino para los vecinos al igual que hacían con el aceite con las pocas aceitunas que recogían. La ganadería existente era mayoritariamente de los Padres Trinitarios afincados en el pueblos y de otros pocos vecinos. Gracias al cereal que vendían a Madrid la economía se fue asentando con un pequeño crecimiento de población
.Durante el siglo XIX se vino manteniendo lo comentado con anterioridad respecto a la economía, en este siglo Cobeña dejó de pertenecer a Guadalajara para pasar a ser de la provincia de Madrid aunque seguía dependiendo del arzobispado de Toledo. Igualmente en 1811 las Corte de Cádiz abolieron los señoríos, no así los derechos a la propiedad que seguía siendo del Condado de La Coruña, aunque al parecer que los condes poseyeran importantes posesiones en el pueblo ya que no se tiene constancia de que se les pagase ni alquileres ni tributos.
En el siglo XX la Guerra Civil aunque Cobeña no fue de los pueblos mas damnificados, sufrió diversos daños en la iglesia en la que se perdieron los retablos así como escasez de productos, saqueos y restricciones.En los años 60 de ese siglo Cobeña como todos los pueblos cercanos a Madrid empieza a experimentar un notable aumento de población, sobre todo debido a la construcción de nuevas viviendas que se dedican a la primera o segunda vivienda de vecinos de Madrid. En la actualidad aparte de que la principal actividad es la de servicios, muchos de los vecinos se dedica al sector industrial existente en poblaciones cercanas como San Sebastián de los Reyes, Daganzo o Paracuellos del Jarama.
Iglesia Parroquial de San Cipriano. Construida en un principio en la segunda mitad del siglo XVI en estilo gótico de transición, con profundas reformas en el siglo XVII. El templo se levantó al menos en tres fases y se culminó en 1704. Esta levantada en piedra caliza con cajoneras de mampostería de cantos rodados, cogidas con encintado de sillares.
Se trata de una construcción de planta rectangular y tres naves, de las cuales la central es más ancha que las otras dos, la misma consta de cuatro tramos desiguales separados por columnas toscanas unidas frente al presbiterio por arcos de medio punto, estando el resto por arcos parabólicos apuntados. La cabecera ligeramente elevada es plana teniendo el coro en alto a los pies, el cual se encuentra sustentado por arcos de medio punto en las naves laterales y en el centro por un arco rebajado. En el interior cabe destacar la pila bautismal gótica de piedra caliza de principios del siglo XVI.
Aunque el templo posee tres portadas con arcos de medio punto, la principal se encuentra en el lado del evangelio y bastante retrasada con respecto a la cabecera, pudiéndose datarse de principios del siglo XVII de estilo renacentista con ciertas influencias herrerianas. Se encuentra enmarcada entre contrafuertes con un arco de triunfo con pilastras con metopas simples y triglifos, con hornacina central con pináculos en sus laterales y rematada por un frontón.
La torre-campanario situada junto a la cabecera en el lado del Evangelio se encuentra igualmente construida con sillares y cuatro cuerpos separados por lineas de imposta. El último cuerpo culminado con un chapitel de pizarra, tiene en cada lado un vano con arco de medio punto donde se alojan las campanas.
Fuente de Arriba y Antiguo Lavadero. Conjunto situado en la Calle La Fuente muy cerca del cementerio.
La fuente se encuentra en el lugar de otra árabe del siglo X aunque excesivamente restaurada o construida. Consta de un pilón rectangular con una pilastra coronada por una pirámide, con un único caño en un de sus laterales, cuyo agua antiguamente se decía que era muy saludable.
El lavadero bajo techado de madera a dos aguas y teja roja, presenta dos pilones clásico, uno para enjabonar y el otro para aclarar, teniendo ambos en la parte superior de los laterales una parte de piedra a modo de las antiguas tablas de lavar.
Ermita de La Dehesa. Según se lee en el blog de tinajasenlacueva cuenta la historia que un pastorcillo cuando apacentaba a sus ovejas, se encontró en el linde de Algete con Cobeña una imagen de la Virgen con el Niño, entre zarzas y retamas que existen en el barranco de Checa, que más tarde se une con el arroyo del Pontón, que cruza la dehesa de Cobeña, para formar el arroyo de la Torrecilla, hecho que produjo una disputa entre los dos pueblos con el fin de dilucidar a que término pertenencia. Después de muchas discusiones, se acordó que se quedase en la parte de Algete muy cerca del cementerio donde se construyó una pequeña ermita, venerándose la imagen como la Virgen de Valderrabé, nombre de la dehesa de Cobeña. La primera mención que se tiene de esta ermita se encuentra en el testamento de 1413 de Sancho López y Marina Alfonso, en el cual se menciona una donación a Santa María de Valderrabé.
Durante la Guerra Civil la ermita quedó en ruinas y la imagen de la Virgen desapareció, aunque no la del Niño que lleva en su brazo derecho, que se conservó en una casa particular. La ermita fue totalmente demolida en 1977.
La actual ermita es de nueva construcción presentando planta rectangular de una sola nave. Está levantada en fábrica de ladrillo con cajones mampostería blanqueada, excepto en la fachada principal donde se ven gruesos cantos rodados. El portón de madera enrejado, presenta adornos con clavos con un dintel de madera. La pequeña espadaña de ladrillo y pequeño tejadillo a dos aguas, presenta vano de medio punto donde se aloja la campana que es sujetada por una viga de madera y un cordel para mover el badajo. La cubierta a dos aguas y tejas rojas.
Coordenadas: 40°34'47"N 3°30'05"W
Después de visitar el núcleo urbano nos dirigimos a la parte norte del pueblo para adentrarnos en la Dehesa de Cobeña. Se trata de un paraje natural de propiedad municipal donde antiguamente pastaba la cabaña ganadera del pueblo, que se guardaba en un corral de obra con forma circular con el tamaño de una plaza de toros y donde se ubicaba un caseta para el guardia. El lugar no solo servia para pasto, sino que también proporcionaba leña a los vecinos del pueblo, sobre todo de retama.
Esta área aparte de poseer una gran variedad de especies arbóreas, es igualmente una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) donde se pueden encontrar ortegas, gangas, sisón, alcaraván, aguilucho canizo, lechuzas, búhos, tordos, chovas, águila perdicera, cernícalos, autillos, cornejas, paloma torcaz etc, además de especies de enorme valor cinegético, albergando a la perdiz, la codorniz, la paloma torcaz, paloma común, la liebre y sobre todo el conejo.
Un pequeño paseo igualmente nos llevará a visita las tres pequeñas lagunas existentes con patos que harán felices a los mas pequeños que visiten el lugar. Sin duda un lugar para pasear y relajarse un poco de las prisas de la gran ciudad.
Si se quiere ir en coche hay que llegar hasta el polideportivo del pueblo, dejarlo en un pequeño parking.
Coordenadas : 40°34'51"N 3°30'12"W
SANTÍSIMO CRISTO DEL AMPARO. Primer domingo de mayo después del día 3 de mayo, desde el viernes hasta el lunes. Actos religiosos y culturales, encierros, festejos taurinos, fuegos artificiales y baile con orquesta.
SANTÍSIMA VIRGEN DEL ROSARIO. Primer fin de semana de octubre. Actos religiosos, espectáculos, conciertos, deportes, concursos y juegos infantiles, fuegos artificiales, bailes, etc
Fuentes: Folletos Comunidad de Madrid, WEB Ayuntamiento, COAM y Paneles explicativos
Ayuntamiento
Plaza de la Villa 1 28863 Cobeña Tfno: 91 620 81 32
Distancia a Madrid: 44 KM Municipios colindantes
Algete EN COCHEPor la A1 hasta salida 23 a la M-100 seguir esta hasta desvío M-103 dirección Cobeña
AUTOBUSES183 Madrid (Plaza de Castilla)185 Madrid (Plaza de Castilla) 263 Madrid (Metro Barajas) 254 Alcalá de Henares (Vía Complutense) N-103 Madrid (Plaza de Castilla) |
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